Griffin me enseñó que casi todas las verduras al horno quedan como mejor, pero el que me gusta especialmente es el brócoli. Acostumbrada a comer toda la vida el brócoli hervido, cuando lo probé cocinado al horno con las ramitas bien crujientes fue un gran descubrimiento :)

Posteriormente, empecé a probar diferentes maneras de cocinar las patatas al horno, en lugar de bañadas en aceite frito. Después de años comiendo comida bastante limpia las frituras me parecen un horror para la digestión, me quedo muy pensada y con baja energía. Esta es una de las opciones que más me gusta, ya que convino las patatas con boniato, zanahoria y verduras, por lo que me resulta más ligero y variado que la patata sola.

Ingredientes:

• 2 patatas grandes
• 2 zanahorias grandes
• 1 boniato grande
• 1 pimiento rojo pequeño o medio grande
• 1 cabeza de brócoli
• 6 dientes de ajo con piel
• 2 cucharadas de AOVE
• 1/2 cucharilla de ajo en polvo
• 1/2 cucharilla de albahaca o tomillo
• 1/2 cucharilla de sal
• Una pizca de pimienta 
• Una pizca de chilli si te gusta el picante